1 Respeto e igualdad: los valores de los scouts.
Los scouts son conocidos en todo el mundo. Sin
embargo, pocos saben en qué consiste la filosofía de estos grupos de
exploradores. Son muchos los valores democráticos que sustentan los principios
del llamados escultismo: convivencia pacífica, igualdad, respeto a los demás,
no disciminación...
Álvaro Ortega, presidente de los Scouts de Andalucía
asegura que el ideario de estos grupos es conseguir "ciudadanos útiles
para la sociedad". Asimismo, matiza que la enseñanza de los scouts es
muy práctica. "Se trata de aprender haciendo y no sólo escuchando".
La Federación de Escultismo en España está formada por unos 50.000 scouts que se dividen en dos grupos diferentes:
- Federación de Asociaciones de Scouts de España
(ASDE).
- Movimiento Scout Católico (MSC).
- Movimiento Scout Católico (MSC).
En líneas generales los dos grupos son "muy
parecidos". Patricia Romero, responsable del Programa de Jóvenes del MSC de Madrid,
asegura que la única diferencia radica en el hecho de que la ASDE es "aconfesional".
Pero, en el fondo, todo el escultismo comparte los mismos principios.
Existen diferentes grupos de scouts repartidos por
numerosas ciudades y barrios. Cada uno de ellos divide a sus exploradores en
pequeños equipos en función de su edad. Los nombres de estas ramas pueden variar
en función a si perteneces al MSC o a la ASDE:
- Castores: 6-8 años.
- Lobatos: 8-11 años.
- Scouts / Rangers: 11-14 años.
- Escultas / Pioneros: 14-16 años.
- Rutas / Rovers: 17-21 años.
- Responsables / Scouters: + 21 años.
- Lobatos: 8-11 años.
- Scouts / Rangers: 11-14 años.
- Escultas / Pioneros: 14-16 años.
- Rutas / Rovers: 17-21 años.
- Responsables / Scouters: + 21 años.
Álvaro Ortega, de Scouts de
Andalucía, manifiesta que cualquier persona puede formar parte del
escultismo "cuando quiera". No es necesario empezar desde los
seis años. "Tratamos de no agobiar, cada uno es libre de entrar o irse
cuando quiera", apostilla.
Helena Romero, de 21 años, ingresó en los scouts en el
año 2000. Tras más de una década aprendiendo la filosofía del escultismo, ahora
es ella quien forma a nuevos niños. "He aprendido tanto en los scouts
que era el momento de enseñar a otros todo lo que me han transmitido a mí",
explica.
Helena forma parte del grupo de Granada. Su principal motivación
cuando entró por primera vez en los scouts era "hacer amigos".
Una razón que se vio complementada por el hecho de que sus propios padres se
conocieron años atrás en uno de estos grupos de exploradores.
Esta joven no duda en recomendar a probar suerte en el
mundo de los scouts. "Consigues una relación muy estrecha, muy
diferente al círculo del colegio o instituto", agrega. Ahora, desde su
posición como monitora, actúa como una "hermana mayor" de un
grupo de unos 20 niños. Para ello ha tenido que completar su última etapa como
'rover' y obtener un título de monitor de tiempo libre.
Los scouts suelen reunirse en sus diferentes barrios
una vez por semana. "Solemos estar juntos unas dos horas y media",
comenta Patricia Romero, del Movimiento Scout Católico de Madrid. En este
tiempo se realizan diferentes actividades y juegos que tienen como objetivo
inculcar los valores scout.
Además, los scouts realizan diferentes excursiones y
campamentos a lo largo del año. A ello se le añaden otras actividades de
reunión en las que se congregan todos los scouts a nivel nacional o de una
Comunidad Autónoma. "En San Jorge, patrón de los Scouts, nos reunimos
unas 3.000 personas en Madrid", subraya Patricia Romero.
¿Cómo es la formación de los scouts? "Trabajamos
para mejorar diferentes áreas como la afectiva, la física o la emocional",
explican desde MSC Madrid. Según comentan, el proceso de aprendizaje es muy "gradual"
y adaptado a las edades de cada rama.
Al principio de cada 'trimestre' los scouts elaboran
un calendario con sus objetivos y estrategias. Por ejemplo, un niño de seis
años que se propone mejorar su higuiene diaria puede proponerse cepillarse
los dientes todos los días. Un joven de 15 años que tiene como meta
mejorar su colaboración en sociedad podría comprometerse con un voluntariado de
un hospital.
El gran secreto de los scouts es que cada uno es "protagonista"
de su propia formación. El presidente de los Scouts de
Andalucía, Álvaro Ortega, asegura que el aprendizaje de los
exploradores siempre es planificado por ellos mismos, aunque con la ayuda de
sus monitores.
El famoso pañuelo que identifica a los scouts tiene un
significado. El portador de esta prenda ha realizado la denominada promesa
scout. "Este compromiso se realiza normalmente a partir de los 12 años,
cuando el niño tiene ya una edad para saber si realmente le gustan los scouts o
no", comenta Helena Romero, perteneciente a un grupo Scout de Granada.
Esta monitora afirma que el pañuelo significa un "compromiso"
con la filosofía del escultismo. Además, es un elemento de reconocimiento para las
reuniones de scouts de otras regiones ya que cada uno tiene unos colores o
líneas diferentes.
"Los scouts somos casi como una familia". Para Patricia Romero, del MSC de
Madrid, los vínculos que se crean entre los jóvenes son tan fuertes que se
asemejan más al concepto familiar que al de la amistad.
En la misma línea apunta Álvaro Ortega. El presidente
de los Scouts de Andalucía añade que ser un scout ayuda a "compartir
visiones y puntos de vista". Una forma de cubrir las necesidades
sociales y las y "inquietudes de numerosos jóvenes.
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